La marea que reina ante una costa se propaga en los ríos hacia arriba con una periodicidad idéntica, pero la disipación de la energía reduce poco a poco la amplitud y la marea acaba por no dejarse notar, es el límite de la parte marítima del río (este límite es de más de 1000 km para el Amazonas).
En el estuario y aún más en el río, la pleamar es más breve que la bajamar; incluso puede suceder que la subida sea casi instantánea, este es el momento del macareo, rompeolas que cierra todo el lecho del río que además remonta rápidamente hacia arriba.
Pororoca del río Amazonas, Brasil
POROROCA
En el Amazonas, con grandes mareas vivas, se forman olas de hasta 4 metros de alto que son aprovechadas por surfistas de todo el mundo que acuden a la desembocadura de este río para subir río arriba haciendo surf con las olas decenas de kilómetros. A pesar de sus devastadores efectos en las riberas del río, es un fenómeno muy apreciado por los pescadores, ya que se reúnen gran cantidad de especies tanto fluviales como marinas para alimentarse y reproducirse, por lo que la pesca en estos instantes resulta de lo más atractiva y emocionante.